Señales de que no merece la pena arreglar el coche

15 Jul Señales de que no merece la pena arreglar el coche

Tener un coche te da una libertad y comodidad únicas. No obstante, también conlleva una serie de situaciones que no siempre son favorables o agradables. Algunas de ellas son un indicio inequívoco de que debes cambiar tu vehículo a la brevedad posible y enviarlo a un desguace de coches Illescas.

Si no sabes identificar esas señales, aquí te mencionaremos tres, para que las tengas en cuenta y actúes en consecuencia, apenas las detectes.

Te recomendamos cambiar el coche cuando…

Estas son las razones por las que creemos que ha llegado el momento de cambiar tu coche actual:

Tiene más de 15 años

Cuando un vehículo tiene más de 15 años puede considerarse como viejo. No importa el cariño que le tengas, seguramente varias de sus piezas mecánicas presentan un desgaste significativo debido al uso regular.

Entonces, en cualquier momento puede presentar un fallo cuya reparación implicará un gasto importante. Por lo tanto, es mejor que prescindas de él y adquieras uno nuevo antes de que esto suceda y golpee tu bolsillo.

Si llega el momento en que surja una reparación mayor que no puedas cubrir, el dinero invertido anteriormente, también habrá sido una pérdida.

Por otra parte, el interior del viejo vehículo generalmente presenta:

• Asientos deformes
• Aire acondicionado averiado
• Perillas y ventanas que no funcionan adecuadamente
• Goteras
• Reproductor dañado

Aspectos como estos reducen la comodidad y hasta pueden ocasionar molestias y mal humor. Estos estados de ánimo, en definitiva, no son los más adecuados para conducir.  Si tienes la posibilidad de adquirir un coche nuevo y enviar el tuyo viejo y destartalado a un lugar como desguaces de coches Illescas, no te lo pienses demasiado.

Un coche nuevo puede ofrecerte comodidades como alta tecnología para facilitarte la conducción, asientos ergonómicos y ajustables o un espacio más amplio. Estos elementos, sin duda, harán más agradable tu experiencia al volante.

Algunos, incluso, pueden acceder a Internet, conectar dispositivos de manos libres vía bluetooth y tener sistema GPS. Todo esto, permite evitar accidentes e incrementar la seguridad de quienes ocupan el coche.

Algunos vehículos incluyen controles fáciles de usar y están ubicados en espacios más visibles y de mejor accesibilidad.

Consume mucha gasolina

Los coches nuevos y de tecnología moderna están diseñados para consumir mucho menos combustible. Los coches viejos, en cambio, consumen una cantidad considerablemente mayor y con los años puede ser peor. Llegan a alcanzar el doble de la cantidad de gasolina requerida en un principio para su funcionamiento.

Puede que, de entrada, esto no te parezca un gasto que amenace tus finanzas, pero a largo plazo, puede ser considerable. Si viajas mucho y tu coche tiene 10 años o más, no esperes llegar a este punto y cambia tu coche a la primera oportunidad.

Siempre está averiado

Si tu coche se daña con frecuencia, aunque sean reparaciones menores, al final de cada año, lo que gastas puede sorprenderte. Además, en la práctica, si tu coche pasa más tiempo averiado que funcionando es como si no lo tuvieras.

Para estar en estas condiciones, es preferible cambiarlo por otro más nuevo que sí funcione cuando lo necesitas. Si eres de los que tiene una familia numerosa, es importante trasladarse con facilidad, comodidad y seguridad y esto no ocurre si tu coche se daña con frecuencia.

Imagina el mal rato que implica que el coche se quede averiado en pleno viaje familiar por carretera:

• Las molestias de pagar un remolque.
• Buscar un taller que probablemente no sea de tu confianza, pero al que deberás recurrir para resolver el problema.
• Destinar días del viaje a la reparación del coche en vez de disfrutar de tus días de relax.

Cuando la situación ha llegado a este punto, definitivamente no vale la pena arreglar tu coche. Por lo tanto, deberás enfocarte en propiciar las condiciones para adquirir uno nuevo y enviar el que tienes a un desguace de coches.